Club de Inversores

Estados Unidos: Bonos largos o bonos cortos, esa es la cuestión


Los bonos de Estados Unidos son uno de los pilares de los portafolios tradicionales. Pero, ¿son un riesgo hoy? ¿Qué pasa con la baja de tasas de la Reserva Federal? ¿Y con la inflación? En definitiva: ¿conviene tener bonos de vencimientos largos o cortos? La respuesta sorprenderá a más de uno.

La semana pasada publicamos un informe especial en CDI Capital (el área de Gestión Patrimonial dentro de Club de Inversores) donde expliqué cuáles son los principales riesgos hoy y por qué creo que los portafolios tradicionales están en peligro.

Por cierto, si no lo leyeron pueden leerlo haciendo click acá

Una de las cosas que digo en ese documento es que
“la relación riesgo retorno de los bonos de vencimientos largos es muy mala”. 

Esta afirmación generó dudas lógicas entre varios lectores, sobre todo porque en una de nuestras estrategias estamos comprados en bonos largos.

Creo que la duda es muy válida y hay cosas muy interesantes para comentar al respecto.

Como adelanto, les anticipo que es una cuestión de horizontes temporales.

Pero antes de seguir, vale aclarar un concepto que es fundamental para entender todo lo que viene:
la duration .

La duration mide cuánto cambia el precio de un bono cuando cambian las tasas de interés . Es, en esencia,
la sensibilidad del bono al movimiento de tasas .

Existe otra forma intuitiva de pensarlo: la duration se parece al “tiempo promedio” en el que recuperás tu inversión ajustada por valor presente. No es exactamente lo mismo, pero ayuda a entenderlo.

En la práctica, podemos asociarla de forma simple con el vencimiento:

  • Bonos de larga duración → suelen ser bonos con vencimientos largos (10, 20 o 30 años).

  • Bonos de corta duración → vencimientos cortos (menos de 3 años).

Y lo más importante: cuanto mayor es la duration, más sensible es el precio del bono a cambios en las tasas.

Para graficarlo con un ejemplo claro, si la Fed sube 100 puntos básicos (1%) la tasa de interés:

  • un Treasury bill a 3 meses casi no se mueve ,

  • pero un Bono del Tesoro a 20 años puede caer fuerte , porque su duration es alta y es mucho más sensible al “rate shock” .

Con esto en mente, la posición de un portafolio frente a la duration se vuelve clave:

  • Estar long duration significa tener bonos largos en cartera. Te beneficiás si las tasas bajan, porque los bonos de alta duration suben más que los cortos cuando esto sucede.

  • Estar short duration significa evitar esos bonos largos y reducir la sensibilidad del portafolio. La forma típica de hacerlo es moverse a US T-Bills u otros instrumentos de vencimiento muy corto, que casi no se afectan cuando suben las tasas.

Hoy estamos en un punto de inflexión. Desde una mirada estructural, las tasas rompieron su tendencia bajista de cuatro décadas y todo sugiere un régimen de tasas más altas hacia adelante.

Los fundamentals también están alineados en este sentido. El déficit estructural del gobierno de Estados Unidos, el endeudamiento crónico, y los riesgos inflacionarios ponen en serio riesgo a los bonos como activo de inversión.

Sin embargo, de corto plazo hay drivers que podrían generar una baja en las tasas de interés y por consecuencia una suba en los bonos largos.

Sin ir más lejos el propio Donald Trump está desesperado por lograr esto. Y más allá de si la Reserva Federal bajará las tasas en su próxima reunión o no, lo cierto es que ya empezó el proceso de baja de tasas de interés.

Y casi con total seguridad esto continuará en 2026. Recordemos que en mayo del próximo año se vence el mandato de Powell y su sucesor será elegido por Trump.

Por eso, es muy probable que la Fed comience a bajar las tasas con mucha más agresividad a partir de mayo de 2026.

Todo esto no invalida la mirada y la tendencia general de largo plazo.

A modo ilustrativo, me imagino que la tasa del Bono a 10 años podría tener un recorrido similar a este:


Por estas razones, creo que de corto plazo tiene sentido estar long duration (tener bonos largos o comprar el ETF que invierte en estos bonos) pero más como una oportunidad táctica que como un activo defensivo o de bajo riesgo en nuestra cartera.

De hecho, es un “trade ” que me gusta. Pero lo considero como una inversión táctica, de corto plazo (pensando en meses) y con riesgo.

Para un portafolio de largo plazo que busca una porción verdaderamente defensiva, los bonos largos difícilmente cumplan ese rol. En este caso sin dudas convienen los bonos cortos, ya que son más consistentes con un perfil conservador.

En definitiva, como podemos ver, todo depende de nuestro horizonte de inversión y lo que estemos buscando. Para un perfil táctico, de corto plazo y con riesgo puede tener sentido tener bonos largos. Para bajar la volatilidad de la global de la cartera y como activos defensivos, convienen los cortos.

Por: Agustin Beret

Cargo: Managing Partner

Correo: [email protected]

LinkedIn: Ver perfil

Facebook
Twitter
YouTube
LinkedIn
Instagram