Las acciones tecnológicas de los EEUU acumulan una caída del orden del 10% en las últimas tres semanas. ¿Es momento de comprar? ¿Es más bien momento de vender?
Una imagen vale más que mil palabras:
Cuando miramos al Nasdaq100 (QQQ) en un gráfico semanal, vemos que la corrección no parece tan dramática (insisto con que hasta el momento acumula un 10%).
Por supuesto que en algunas acciones en particular, la corrección ha sido mucho más profunda. Para poner algunos ejemplos, Tesla está -46% respecto de su máximo del pasado 18 de diciembre, Amazon está -19% respecto de su máximo del 4 de febrero y Nvidia está -28% desde su máximo del 7 de enero.
Pero todavía es muy prematuro para hablar de un cambio de tendencia. Definitivamente estamos atravesando una corrección de importancia, pero hasta el momento es sólo eso.
¿Qué es lo que parece motivar esta caída? La razón que aparece como más obvia es esta guerra comercial que ha iniciado Donald Trump contra México, Canadá y China. Esta situación agrega mucha incertidumbre.
Recordemos que esta es la estrategia que el Presidente de los EEUU ha implementado en el pasado para reducir “a las trompadas” el déficit de cuenta corriente. Y ahora parece más determinado que nunca a conseguirlo.
Pero también es cierto que si las acciones en EEUU no hubieran tenido una valuación tan “jugosa” o “exagerada”, difícilmente hubiéramos visto una caída como la que vimos.
Como conclusión, lo mejor para saber qué hacer en cada caso es tener un plan. Y para eso, lo mejor siempre es poder plantearlo con un asesor profesional.
Si ustedes no tienen un plan, tarde o temprano terminarán tomando una pésima decisión en el momento incorrecto. Esto se traduce típicamente en vender en momentos de pánico.
Nota: El material contenido en esta nota NO debe interpretarse bajo ningún punto de vista como consejo de inversión o recomendación de compra o venta de un activo en particular. Este contenido tiene fines únicamente educativos y representa únicamente una opinión del autor. En todos los casos es recomendable asesorarse con un profesional antes de invertir.
